ALIMENTANDO EL CUERPO Y EL ESPÍRITU

Tras la mañana ajetreada de visitas turísticas y curso de cocina, dedicamos la tarde-noche a alimentar nuestra mente y nuestro cuerpo. A primera hora de la tarde fuimos a ver un espectáculo en directo de kathakali. El kathakali es una mezcla de danza y teatro en la que siempre intervienen los dos personajes que veis en las fotos. 

La trama cambia en cada espectáculo, pero los personajes son los mismos y son siempre interpretados por hombres aunque uno de los personajes sea mujer. No hay diálogos, son todo gestos aderezados con música de tambores y timbales y con la voz de un solista. Lo que más llama la atención es, sin lugar a dudas, el maquillaje y la vestimenta. Puedes ir una hora antes de que empiece la actuación para ver cómo los propios actores se maquillan y se visten. Merece la pena ir antes.

Después de disfrutar de este fantástico espectáculo nos fuimos a las pescaderías de las redes chinas a saciar nuestra hambre. Por poco más de 11 euros compramos una langosta, tres langostinos bien hermosos, un calamar y un pez cuyo nombre desconozco, y nos fuimos con ello a uno de los restaurantes del paseo donde nos lo cocinaron todo a la brasa por unos 6 euros. Total, una mariscada completa que nos supo a gloria.