El viaje desde Bromo a Bali ha sido absolutamente caótico. Inicialmente un viaje plácido de cuatro horas se convirtió en una pesadilla de doce. Todo iba a ser placentero según la agencia donde contratamos todo en Yogyakarta. El tren bien, la cascada Madakaripura también bien, el Bromo espectacular... Antes de seguir hay que aclarar que nuestra integridad física no corrió peligro.
Después de que nuestro guía nos dejara en Probolinggo, ciudad base para la ascensión al volcán, el supuesto bus de las 11.30 pasó a ser el bus de las 11. Pensaréis que el cambio fue bueno, pues no. A ciencia cierta no sabemos el por qué del cambio de hora. Sin venir a cuento cuando llevamos ya tres horas nos cambiaron de bus. Estábamos un poco aturdidos porque nos pilló pegando una cabezada. Si bien el primer bus era casi un estándar europeo, el nuevo parecía un camión de transportes de animales. Aceptamos el cambio sin más queja.
Hemos visto cosas peores en India con trenes llenos hasta la bandera. En Camboya los autobuses con karaoke y ausencias de paradas eran insoportables. Aquí se sumaba todo más detenciones sin sentido para que el conductor se fumara su cigarrillo. Puedo asegurar y no exagero que estuvimos más tiempo parados que en marcha. Al final parecía que llegaba tarde y aceleró el ritmo.
Por suerte al final llegamos a Bali no sin la colaboración de un local que hablaba inglés y se molestó en avisar a nuestro actual hotel para que vinieran a por nosotros. Tras más de trece horas de viaje en dos coches privados, dos autobuses y un ferry terminó nuestro periplo por Java.
¿Qué hemos aprendido de este viaje?:
1. Usar agencias locales que aparezcan recomendadas en las guías. Nosotros nos fiamos del buen hacer de nuestro hotel en Yogyakarta, pero su agencia recomendado nos falló.
2. Exigir siempre transporte "executive". Pensaréis que somos unos remilgados, pero si vas con el tiempo justo no puedes perder tiempo en los traslados. Si hubiéramos venido aquí un mes tened por seguro que no nos hubiera molestado tanto.
3. Saber donde se está en cada momento cuando nadie a tu alrededor habla tu idioma y no saben explicarte donde éstas. Es fundamental el uso de un GPS. Nosotros usamos siempre el smartphone pero sin línea sólo hay una solución. Tenéis que usar la app Nokia Here. Es completamente gratuita y te permite descargar los planos offline de todo el mundo. Lo hemos llegado a usar para ayudar a un taxista en Yogyakarta.
4. Si necesitáis ayuda buscar un iPhone ¿Por qué? Sencillo. En España cualquiera tiene un iPhone de última generación, pero en Bali es inaccesible para la mayoría. Un smartphone de 13.000.000 de rupias (800 euros) supone tener un buen trabajo. Además que usar una línea española fuera de Europa supone empeñar un riñón.
Esperamos serviros de ayuda con este post. Se hace duro ver cómo pasa el tiempo y cada hora en el bus es una menos en la maravillosa Bali.
Después de que nuestro guía nos dejara en Probolinggo, ciudad base para la ascensión al volcán, el supuesto bus de las 11.30 pasó a ser el bus de las 11. Pensaréis que el cambio fue bueno, pues no. A ciencia cierta no sabemos el por qué del cambio de hora. Sin venir a cuento cuando llevamos ya tres horas nos cambiaron de bus. Estábamos un poco aturdidos porque nos pilló pegando una cabezada. Si bien el primer bus era casi un estándar europeo, el nuevo parecía un camión de transportes de animales. Aceptamos el cambio sin más queja.
Hemos visto cosas peores en India con trenes llenos hasta la bandera. En Camboya los autobuses con karaoke y ausencias de paradas eran insoportables. Aquí se sumaba todo más detenciones sin sentido para que el conductor se fumara su cigarrillo. Puedo asegurar y no exagero que estuvimos más tiempo parados que en marcha. Al final parecía que llegaba tarde y aceleró el ritmo.
Por suerte al final llegamos a Bali no sin la colaboración de un local que hablaba inglés y se molestó en avisar a nuestro actual hotel para que vinieran a por nosotros. Tras más de trece horas de viaje en dos coches privados, dos autobuses y un ferry terminó nuestro periplo por Java.
¿Qué hemos aprendido de este viaje?:
1. Usar agencias locales que aparezcan recomendadas en las guías. Nosotros nos fiamos del buen hacer de nuestro hotel en Yogyakarta, pero su agencia recomendado nos falló.
2. Exigir siempre transporte "executive". Pensaréis que somos unos remilgados, pero si vas con el tiempo justo no puedes perder tiempo en los traslados. Si hubiéramos venido aquí un mes tened por seguro que no nos hubiera molestado tanto.
3. Saber donde se está en cada momento cuando nadie a tu alrededor habla tu idioma y no saben explicarte donde éstas. Es fundamental el uso de un GPS. Nosotros usamos siempre el smartphone pero sin línea sólo hay una solución. Tenéis que usar la app Nokia Here. Es completamente gratuita y te permite descargar los planos offline de todo el mundo. Lo hemos llegado a usar para ayudar a un taxista en Yogyakarta.
4. Si necesitáis ayuda buscar un iPhone ¿Por qué? Sencillo. En España cualquiera tiene un iPhone de última generación, pero en Bali es inaccesible para la mayoría. Un smartphone de 13.000.000 de rupias (800 euros) supone tener un buen trabajo. Además que usar una línea española fuera de Europa supone empeñar un riñón.
Esperamos serviros de ayuda con este post. Se hace duro ver cómo pasa el tiempo y cada hora en el bus es una menos en la maravillosa Bali.
No hay comentarios:
Publicar un comentario